De la misma forma que Austria y Luxemburgo, Portugal es uno de los países europeos que prohíbe el uso de cámaras de salpicadero, las llamadas dashcam.
Como estos dispositivos están permitidos en la mayoría de países, incluida España, que es la principal puerta de acceso a Portugal, los turistas deben tener cuidado con el uso de las cámaras de salpicadero porque pueden enfrentarse a multas e incluso a penas de prisión.
No solo no se pueden utilizar las dashcam: tampoco se pueden llevar en el coche
A lo largo de los últimos días, varios medios británicos han recordado a sus lectores que las cámaras de salpicadero, más conocidas como dashcam, están prohibidas en Portugal. La prohibición está en vigor desde hace años, pero ahora comienza la temporada de turismo y el aviso tiene especial relevancia porque muchos británicos están acostumbrados a llevar este dispositivo en su coche, puesto que en Reino Unido está muy normalizado su uso: Mirror asegura que 32,7 millones de británicos utilizan dashcam.
Esa costumbre les puede llevar a tener un problema en los países donde no se pueden utilizar estas cámaras, como Portugal, un destino que cada vez eligen más ciudadanos británicos.
En cualquier caso, el aviso sirve para todo el mundo que viaje a Portugal, incluidos los españoles porque las cámaras de salpicadero han ganado mucha popularidad en nuestro país a lo largo de los últimos meses, incluso es habitual ver vídeos virales con imágenes captadas por dashcams en España. Nosotros también viajamos mucho a Portugal, por lo que conviene tener esta prohibición en cuenta para evitar un mal rato en el país vecino y posibles sanciones.
El Artículo 19 de la Ley Nacional nº58/2019 de Portugal prohíbe el uso de estos equipos de acuerdo a lo que estipula el Reglamento General de Protección de Datos de Portugal: “Las cámaras no pueden enfocar: a) Las vías públicas, los predios colindantes u otros lugares que no sean del dominio exclusivo del responsable, salvo lo estrictamente necesario para cubrir el acceso a una propiedad”.
En el Artículo 199 de su Código Penal, Portugal contempla sanciones administrativas e incluso penas de prisión por grabar imágenes en la vía pública: “Utilizar o permitir la utilización de las grabaciones(...), aun cuando hayan sido producidas lícitamente; será castigado con pena de prisión de hasta un año o multa de hasta 240 días”.
Incluso Skoda avisa de lo que puede suponer utilizar una cámara de salpicadero en Portugal: “Portugal tiene la política más estricta: ¡ni siquiera se permite tener una cámara para el salpicadero! Así que es de esperar que la policía te lo ponga difícil incluso si encuentra una cámara en el asiento del coche, en la guantera o en el maletero. Nadie sabe qué deben hacer los conductores si la única ruta de entrada al país pasa por España, donde el uso de cámaras es ilimitado”.
Lo que dice la marca checa es que, como en España sí se pueden utilizar las cámaras de salpicadero, pero en Portugal ni siquiera se pueden llevar en el coche, no se sabe qué hacer con esas cámaras si se viaja a Portugal en coche a través de España. En ese supuesto, es de esperar que las autoridades portuguesas sean comprensibles, pero no dejar de ser una cuestión inquietante y que los turistas deben tener en cuenta.
Lo que no se sabe es qué pasa con las cámaras de salpicadero que llevan incorporadas algunos coches de fábrica. En este caso, el dispositivo no se puede sacar del vehículo.
Imágenes | Renault, GEM y Unsplash
